Albacete cuenta con una clínica dental solidaria para atender a personas en situación de vulnerabilidad. Desde sus comienzos, parte del equipo de PLAdental trabaja de forma voluntaria y altruista en esta clínica solidaria una vez por semana. Atienden a una media de 15 pacientes al día, y abre tres días a la semana.
Hace algo más de cuatro años nació en Albacete este bonito proyecto. Una clínica dental solidaria, impulsada por la Fundación Odontológica Solidaria, que preside la odontóloga María Dolores Cuenca. El Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de la capital, no dudó en apoyar este proyecto. Y desde sus comienzos, parte del equipo de PLAdental trabaja de forma voluntaria y altruista en esta clínica solidaria dos veces por semana.
El objetivo de este proyecto es garantizar el acceso a la salud bucodental de las personas con menos ingresos económicos. Muchas personas no pueden acceder a consultas privadas para tratar sus patologías dentales y eso conlleva importantes problemas de salud. Esta clínica solidaria es una respuesta de los dentistas de Albacete a la insuficiencia de las prestaciones odontológicas que ofrece la sanidad pública.
Los doctores Rafael y Marta Pla acuden una vez por semana
El doctor Rafael Pla y la doctora Marta Pla acuden una vez por semana a esta clínica de forma voluntaria. PLAdental también contribuye con dos higienistas, que en vez de pasar consulta en nuestra clínica dental, una vez por semana asisten a los doctores en sus consultas de la clínica solidaria.
En la actualidad, en esta clínica solidaria atiende a unos 15 pacientes por día. Esta clínica dental solidaria abre tres días a la semana. Está atendida íntegramente por el personal de diferentes clínicas dentales de la capital, que de forma altruista dejan sus consultas para asistir a estos pacientes. El precio que ellos pagan por sus tratamientos sirve para cubrir gastos básicamente.
Además, tras los meses de parón por la situación de pandemia, está clínica también ha tenido que adaptar sus instalaciones.
En Albacete, en torno a un millar de personas en situación de vulnerabilidad y desigualdad social se han beneficiado de estas prestaciones. Pacientes que tienen que ser derivados directamente por los servicios sociales. Las dolencias quedan resueltas en menos de tres meses gracias a los voluntarios, que como los doctores Rafael y Marta Pla, pasan consulta en esta clínica solidaria.